La IA ya organiza las colas en Disney y Legoland. No es magia: es una estrategia para que esperes menos y gastes más
Publicado el 22/06/2025 por Diario Tecnología Artículo original
Pasar un día en un parque de atracciones es una actividad placentera, pero hay algo que puede arruinar la experiencia (y no es la comida normalita precio de restaurante de lujo): las colas. Sea en un atasco en coche, esperando para subir a un avión o para entrar a una atracción, las colas nos hacen perder mucho tiempo -y dinero- cada año, pero hay algo que ha llegado al rescate de algunos parques: la inteligencia artificial.
Y parece que… funciona para estar menos en la cola. Y para gastar más dinero.
Disney y su FastPass+. Se trata de una de las empresas que más apuesta por la tecnología en sus partes. Bien con robots para interactuar con visitantes, que sean dobles de acción o, directamente, con tecnología invisible para no hacer cola en las atracciones más populares. No nos referimos a su pase de 400 dólares (entrada al parque no incluida) para saltarse colas (que también tienen parques como Port Aventura o el Parque de Atracciones de Madrid), sino a algo que han denominado ‘FastPass+’.
Es un sistema que utiliza la IA para equilibrar los picos de audiencia en una atracción. Crea una cola virtual en la que podemos reservar el acceso a ciertas atracciones populares a través de la app My Disney Experience y esa reserva se carga en la Magic Band (la pulsera inteligente) o en los tickets con radiofrecuencia. En función de los cálculos de la IA sobre el uso de la atracción, nos avisa para que nos desplacemos a la misma, pudiendo entrar sin hacer una larga cola.
El Gran Hermano de Legoland. Otro ejemplo es Legoland. Con una tecnología que han bautizado como ‘Vision AI’, el parque mejora la gestión de las colas gracias a un sistema de cámaras colocadas sobre las atracciones.
Analizan en tiempo real el número de personas que se encuentran en cada atracción, los visitantes que están en el parque y la expectativa de uso de cada atracción popular para que los gestores puedan tomar decisiones en tiempo real.
Resultados. Estas medidas no se implementan por capricho y tienen un doble propósito: que el usuario esté más contento al perder menos tiempo en las colas, sí, pero también que pase más tiempo en otros lados del parque en el que pueda comprar comida, objetos o servicios. Que funcionen es algo que se va puliendo con el tiempo, pero ya hay algunos resultados interesantes.
Por ejemplo, el análisis de Legoland ha permitido que el parque identifique momentos en los que algunas de sus atracciones tenían un 10% de los asientos vacíos. Implementando ajustes, como la entrada a los llamados ‘single riders’ (usuarios que van solos), han incrementado en un 30% el promedio de viajes por atracción. Esto implica disfrutar de una atracción adicional diaria por visitante.
Otro ejemplo es que, si se usan cosas virtuales, los visitantes tienen más tiempo para gastar en el parque un 25% más que los que no las usan.
¿Y la privacidad? El sistema de Disney es como un Excel con apoyo de la IA, pero… ¿qué ocurre con nuestra privacidad en una herramienta que emplea cámaras para monitorizar de forma activa a los visitantes del parque? Ya tienen cámaras por motivos de seguridad, pero en el caso de Legoland, hablamos de un sistema que constantemente está monitorizándonos.
En declaraciones a Business Insider, los responsables del parque afirman que las cámaras “analizan la cantidad de personas montando en las atracciones en cualquier momento. No te identifica de manera única, pero sí detecta cuántas personas hay en una atracción”. Es decir, ven siluetas y movimientos humanos, no caras
Lo que está claro es que las colas en los parques de atracciones son un problema para el usuario, tanto que hay grados educativos en los que se aprende cómo diseñarlas mejor, y quizá en la gestión de las mismas, la IA y sus análisis en tiempo real puedan ser la solución.
Imagen | Xataka
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