Llevo 19 años usando el Dock en Mac. Es hora de quitarlo de en medio

Publicado el 09/05/2025 por Diario Tecnología
Artículo original

Llevo 19 años usando el Dock en Mac. Es hora de quitarlo de en medio

Todavía recuerdo los tiempos en los que los usuarios de Windows imitaban el dock de Mac. Mis colegas universitarios tenían envidia de esa barra tan útil, tan "elocuente", para acceder a sus aplicaciones favoritas. Y empezaron a llegar las imitaciones: Docky, Nexus, ObjectDock, Plank, Latte Dock y Rocket Dock.

Llegaron los docks dinámicos, los tematizados por temporada (navidad, con su caída de nieve), hasta algunos de moralidad dudosa —y que consumían un montón de recursos de la gráfica—. Hasta Microsoft adaptó la fórmula. Sus Microsoft PowerToys y el Windows Dynamic Taskbar no son sino iteraciones de la misma idea.

Pero ninguno lograba lo mismo que el original, ninguna tenía esa versatilidad, esa capacidad de transicionar de un espacio minúsculo a uno gigante. Apple llevaba la delantera en cuanto a diseño y a usabilidad. Hoy esa declaración suena demasiado parecida a la de 2001. ¿Qué ha pasado durante todo este tiempo?

El Dock ya no entiende cómo trabajo

Grabacio N Pantalla 1

Hubo un tiempo en que tener una fila ordenada de iconos tenía sentido. Hoy, con Raycast, con herramientas con ChatGPT y Siri integradas en Spotlight, buscadores como Perplexity o las herramientas de análisis de texto de Apple Intelligence, los flujos de trabajo ya no giran en torno a abrir aplicaciones, sino a ejecutar acciones.

El Dock permanece estático. Siempre visible, sin adaptarse a lo que estás haciendo. No distingue entre foco creativo, pausa mental o una reunión. No sugiere, no reacciona, no aprende. Y yo soy de los que arrastran las imágenes para abrir la app de edición, pero es que mientras macOS avanza con Atajos, Stage Manager o los nuevos espacios de concentración, el Dock sigue siendo eso: una fila de iconos. En macOS 15 he probado el efecto aladino —siempre fue mi modo favorito—, el efecto espejo, lo he cambiado de sitio... ya da igual, simplemente no es algo que ofrezca funcionalidad real.

Cada píxel cuenta

Captura De Pantalla 2025 05 09 A Las 15 14 35

Decía hace dos años mi compañero Miguel que el dock del Mac llevaba tiempo encasillado. La realidad es peor: el dock apenas ha cambiado. Y eso es un problema bastante grave si tienes, como yo, un MacBook Air M3 de 13 pulgadas.

En estos tamaños, cada centímetro cuenta. Un elemento fijo en la parte inferior de la pantalla puede parecer inofensivo, pero cuando trabajas con ventanas maximizadas, editores de texto, hojas de cálculo o timelines de edición… el Dock no ayuda. Hay portátiles en el mercado que presumen de una relación 16:10 o 3:2 y los fabricantes argumentan que agilizan la productividad.

Portadilla

Y ahí sigue el Dock. Oculta contenido, entorpece el cambio entre tareas y, si está en modo oculto, su aparición accidental puede frustrar más que ayudar. La multitarea en macOS ha mejorado. Es solo que el Dock sigue sin formar parte de esa evolución.

¿Alternativas al Dock? No tantas

Siempre me gusta probar alternativas. Recuerdo lo mucho que me gustó la barra lateral de OperaGX —hasta que me saturó— o el chatbot de Edge. No es fácil mantener un equilibrio entre funcionalidad y ruido. Herramientas como Raycast o Alfred permiten abrir, buscar y ejecutar casi cualquier acción sin mover las manos del teclado. Son contextuales, extensibles, automatizables —aunque los workflows devoran la RAM, también hay que decirlo—.

Hoy día, hay alternativas al Dock de toda la vida: uBar, que lo convierte en una barra de tareas más versátil, el DockShelf vertical o ActiveDock, que añade vistas previas, personalización más amplia y gestión de ventanas. Algunas añaden funciones útiles, aunque a veces complican las cosas. No son nativas, al fin y al cabo.

Bar

El dock de macOS fue una herencia de Steve Jobs y el equipo de NeXT. La idea original del Dock como lo conocemos hoy nació en NeXTSTEP en 1995 y fue diseñado principalmente por el ingeniero Avie Tevanian y Scott Forstall. Cuando Apple compró NeXT en 1997, muchas ideas de su entorno gráfico de NeXTSTEP se integraron en lo que luego sería Mac OS X (Cheetah), lanzado en 2001. Es normal que parezca vetusto. Han pasado más de 20 años.

El Dock vivió su momento, su época. En tiempos donde la IA se integra en cada rincón, es ahora cuando Apple debe revisar macOS y repensar un uso más allá de una fila 2D de iconos que rebotan. Necesitamos algo que se adapte según el contexto, la hora del día y las apps en ejecución. Como hacía la touchbar de los MacBook Pro. Aquel fue un camino revelador: no la necesitábamos "en físico", sino en virtual.

En Applesfera | macOS 16: todo lo que creemos saber sobre la nueva actualización del Mac

En Applesfera | Apple macOS: todas las versiones hasta la fecha, cómo saber la que estás usando y cómo actualizar el sistema operativo

utm_campaign=09_May_2025"> Isra Fdez .