La rocambolesca historia del Ferrari 512 TR de Michael Jordan: 15 años perdido y ha aparecido entre las cenizas de un incendio
Publicado el 28/06/2025 por Diario Tecnología Artículo original
El mundo del motor y del baloncesto se han unido por el inesperado regreso de una auténtica joya: el Ferrari 512 TR que perteneció a Michael Jordan. Durante décadas, este coche fue considerado un mito perdido, que alimentó historias y leyendas entre aficionados al baloncesto y coleccionistas de coches.
Ahora, tras más de una década de misterio, el icónico deportivo italiano vuelve a ser noticia gracias a una búsqueda exitosa que no ha hecho más que acrecentar la leyenda de esta unidad. La historia de este Ferrari es una travesía que mezcla éxito, misterio y una supervivencia milagrosa frente a la naturaleza.
El Ferrari de Jordan: símbolo de una era
En 1992, en pleno auge de su carrera con los Chicago Bulls, Michael Jordan era frecuentemente fotografiado saliendo de un espectacular Ferrari 512 TR. Este coche no pasaba desapercibido, no solo por su diseño y el estruendo que generaban los 428 CV de su motor V12, sino también por su matrícula personalizada: "M-AIR-J", un guiño directo a su popular propietario.
El Ferrari se convirtió en parte del imaginario colectivo de los fans, representando el lujo y el éxito deportivo que rodeaba al 23 de los Bulls en esos años. Su presencia en las calles de Chicago y en los medios reforzaba la imagen de Jordan como una superestrella capaz de convertir en oro todo lo que tocaba. Este Ferrari, con su inconfundible matrícula, fue testigo silencioso de una de las etapas más gloriosas del baloncesto mundial.
En 1995, Michael Jordan decidió vender su Ferrari a Chris Gardner, el exitoso empresario cuya vida inspiró la película "En busca de la felicidad", protagonizada por Will Smith.
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Gardner, consciente del peso del legado, optó por jugar al mismo juego que el astro de los Bulls, instalándole una matrícula personalizada en la que se leía: "Not MJ", dejando claro que la joya ya no pertenecía al deportista.
En 2010, Gardner subastó el coche por 100.000 dólares y, desde entonces, el paradero del Ferrari se convirtió en un misterio absoluto. Nadie supo nada más sobre el destino del deportivo que un día fue de Jordan. Durante los últimos 15 años, el Ferrari 512 TR de Michael Jordan permaneció oculto alimentando todo tipo de rumores y especulaciones.
La búsqueda y el milagro de la supervivencia
El concesionario de coches clásicos para coleccionistas We are Curated, cofundado por el emprendedor español Jordi Ricart, inició una búsqueda exhaustiva del Ferrari basándose en su número de bastidor. Por suerte, han dejado documentada la historia de su búsqueda en un vídeo.
Tras más de una década de investigaciones, lograron localizarlo en California. El propietario, un coleccionista que lo había adquirido en la subasta de 2010, lo condujo solo unos meses, antes de recibir un diagnóstico de cáncer que lo llevó a dejar el coche aparcado en su casa mientras se sometía a tratamiento.
La historia dio un giro aún más inesperado a principios de 2025, cuando los devastadores incendios forestales arrasaron la zona donde vivía el coleccionista. Sorprendentemente, mientras las casas de los alrededores quedaron reducidas a cenizas, la suya permaneció intacta y, con ella, su colección de coches. El Ferrari de Jordan, más allá de una capa de polvo por la ceniza, se encontraba en perfectas condiciones, tal y como el concesionario mostró en su perfil de Instagram.
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No obstante, aunque el histórico Ferrari 512 TR se conserva en un estado razonablemente bueno para haber pasado por tres propietarios que lo han usado, los 15 años encerrado en un garaje han pasado factura a sus componentes mecánicos.
Por este motivo, el concesionario, ahora cuarto propietario del vehículo, ha decidido enviarlo de vuelta a la factoría de Maranello de la que salió hace más de 33 años, para una restauración completa de su mecánica. El presupuesto destinado a esta operación asciende a 200.000 dólares.
El futuro del Ferrari de Jordan aún está por decidir. Su nuevo dueño contempla la posibilidad de organizar un recorrido para que, tras su restauración, el espectacular deportivo se reencuentre con sus tres anteriores propietarios y, quizás, exhibirlo en el Museo Ferrari o en el prestigioso rally de Pebble Beach.
Tras ese homenaje a los protagonistas de su historia, el coche podría salir a subasta, donde se estima que podría superar el millón de dólares. Tal vez, el destino quiera cerrar el círculo y que sea el propio Michael Jordan quien lo recupere finalmente.
Imagen | Ferrari, Flickr (Zach Catanzareti)
utm_campaign=28_Jun_2025"> Rubén Andrés .