En Aragón hay dos pueblos enzarzados en una pelea legal por una razón: quién debe acoger el cráneo del Papa Luna
Publicado el 25/08/2025 por Diario Tecnología Artículo original
En vida Pedro de Luna y Gotor (1328-1423), aka Benedicto XIII, aka Papa Luna, fue una figura tan fascinante como controvertida. Por más atribulada que fuese su vida (y lo fue) lo que probablemente jamás imaginó el famoso "antipapa" aragonés es que con el paso de los siglos su calavera acabaría protagonizando una historia digna de un thriller de Dan Brown y enfrentando a dos pueblos que desde hace años echan en un pulso legal para aclarar quién merece acoger la reliquia.
Ahora esa historia escribe un nuevo capítulo.
¿Qué ha pasado? Que por increíble que parezca, el Papa Luna, un personaje fallecido hace más de 600 años, está protagonizando una acalorada disputa legal entre dos villas aragonesas: Illueca y Sabiñán. Las dos localidades están separadas por 15 minutos escasos en coche y juntan no llegan a 3.500 vecinos, pero cuando se trata del Papa Luna mantienen dos posturas en apariencia irreconciliables: ambas reivindican ser el lugar de descanso legítimo de los restos del "antipapa".

¿Por qué es noticia? El pleito entre Illueca y Sabiñán a cuenta del cráneo del Papa Luna, que es lo poco que se conserva de su cadáver, no es nada nuevo. Ambas localidades llevan años batallando para aclarar cuál de las dos tiene más derecho a ser el lugar de descanso de la calavera, algo que ya llevó a que en 2023 al Tribunal Superior de Justicia de Aragón se pronunciase a favor del Consistorio de Sabiñán.
La novedad, como acaba de revelar El Periódico de Aragón, es que el Ayuntamiento de Illueca no parece dispuesto a darse por vencido y ha contratado a un abogado para que reabra el proceso. Para lograrlo plantea presentar una nueva demanda, algo que, según avanza el diario regional, ocurrirá en septiembre.
¿Qué argumenta? Lo que resolvió hace más dos años la justicia aragonesa es que la reliquia del Papa Luna pertenece al Ayuntamiento de Sabiñán. Ahora Illueca enfoca su reclamación desde otro ángulo y sostiene que la clave no está en quien es el dueño legal de los restos, sino cuál era la voluntad original del "antipapa".
"Al juez no le vamos a instigar para que diga quién es el propietario del cráneo, sino para que diga quién puede cumplir mejor la voluntad de los descendientes del Papa Luna", comenta a El Periódico Jorge Español, el letrado fichado por Illueca. No es el primer caso sobre patrimonio que llega a su despacho. Español ya se hizo famoso por defender al Ayuntamiento de Sijena frente a la Generalitat.
¿Y de donde viene la disputa? Para resolver esa pregunta antes hay que conocer la peculiar (y atribulada) historia de los huesos del Papa Luna. Tras su muerte en 1423, en Peñíscola, su sobrino reclamó el cadáver y lo trasladó al castillo palacio de Illueca, la misma localidad donde había nacido el "antipapa" en 1328. Allí, en su villa natal, permanecieron los huesos del polémico Papa Luna los siguientes siglos hasta que a comienzos del XVIII acabaron profanados.
Se cuenta que entre 1701 y 1707 las tropas francesas que apoyaban a Felipe V en la Guerra de Sucesión sacaron los restos de su tumba y que de los malparados huesos del Papa Luna solo se recuperó el cráneo, un fragmento de calavera que se trasladó al palacio de Argillo, en Sabiñán. Allí descansó otros tantos siglos hasta que con la llegada del siglo XXI el cráneo volvió a protagonizar otro capítulo truculento.
¿Qué pasó? Que en abril de 2000 alguien robó la reliquia. La calavera se custodiaba en una urna de madera situada dentro de una capilla, pero eso no impidió que aquella primavera de hace más de 25 años dos jóvenes la saqueasen. El cráneo acabó escondido en una caseta mientras los saqueadores intentaban que el alcalde de Illueca les pagase un rescate de un millón de pesetas.