Desde hace años, el "dopaje fecal" es un problema en el deporte de élite. Ahora la ciencia quiere democratizarlo

Publicado el 29/03/2025 por Diario Tecnología
Artículo original

Desde hace años, el "dopaje fecal" es un problema en el deporte de élite. Ahora la ciencia quiere democratizarlo

En 2019, un equipo de científicos de la Universidad de Harvard monitorizó la flora bacteriana de 15 corredores de la maratón de Boston durante la semana previa y la posterior. Hicieron muchos descubrimientos, pero uno especialmente interesante: tras la competición todos sufrieron un incremento significativo de bacterias del género Veillonella.

Ya se sabía que el ejercicio altera la microbiota y, de hecho, no era especialmente sorprendente que estas bacterias (que rompen el ácido láctico y, por tanto, reducen la fatiga) estuvieran ahí dentro. Lo que querían descubrir era otra cosa. Por eso, cogieron muestras de esa flora y las introdujeron en ratones.

El resultado fue un aumento en la resistencia física muy significativo. Desde entonces, hay gente tratando de sacarle partido a esto.

El tesoro que esconde el intestino. Ahora un equipo de Francia ha estudiado la microbiota intestinal de atletas de élite con alta capacidad aeróbica (futbolistas y ciclistas). La idea central era ver si había diferencias en la composición de la flora y en su funcionalidad con respecto a personas no deportistas.

La primera sorpresa es que cuanto más deporte hacían los sujetos, menor era la diversidad de su microbiota. Y digo que es sorprendente porque, como nos dice Rosa del Campo a través del SMC España, "esto se asocia con una condición poco saludable". Sin embargo, en este caso parece que "se justifica con la especialización de esas bacterias en el intestino". Es decir, que al someter a la microbiota a ambientes más exexigentes, se autoregula para optimizarse.

Sin embargo, como dice la investigadora del Hospital Ramón y Cajal, eso no es lo más interesante. "Lo más llamativo es cuando evalúan la capacidad de reproducir esto en ratones".

¿Qué han hecho? Han cogido personas muy sedentarias y muy deportistas y "han trasplantado sus heces a los ratones durante varios días". El resultado muestra que "la capacidad de esfuerzo aeróbico en los ratones está condicionada por la microbiota".

¿Por qué? Aunque la investigación aún es algo preliminar, todo parece indicar que  "se debe fundamentalmente al consumo de glucógeno, buen control de azúcar y producción de ácidos grasos de cadena corta".

¿Qué implicaciones tiene esto? Pues bien, parece que bastantes. Hay que recordar que desde hace años las agencias antidopaje trabajan en luchar contra el dopaje microbiómico. De hecho, todo parece indicar que el "trasplante fecal" s una práctica habitual en ciertos ambientes de deporte de élite.

Pero la pregunta, como siempre, es si esto se puede escalar. Si podemos empezar a intervenir en la microbiota de manera masiva para mejorar la salud de amplias capas de la población. Desde hace años, el boom de los probióticos ha pillado a als grandes farmacéuticas con el pie cambiado y ha inundado el mercado con pseudociencia.

No obstante, las posibilidades (como vemos) están encima de la mesa. Cada vez está más calro que la salud se conquistará con el estómago.

Imagen | julien Tromeur | Miguel A Amutio

En Xataka | Esta pastilla es una caca pero puede salvarte la vida

utm_campaign=29_Mar_2025"> Javier Jiménez .