En tiempos de caídas en bolsa, una inversión de lujo se ha convertido en un "refugio": los bolsos
Publicado el 17/04/2025 por Diario Tecnología Artículo original
En tiempos de incertidumbre financiera, caídas generalizadas en los mercados bursátiles de todo el mundo y el dólar perdiendo credibilidad como moneda de referencia, los inversores buscan valores refugio para proteger su patrimonio. El oro acostumbraba a ser la salvaguarda en tiempos de crisis, pero una nueva tendencia ha ido cobrando fuerza en los últimos años: la inversión en artículos de lujo, especialmente los bolsos exclusivos como el Birkin de Hermès.
Salir de la bolsa para meterse en el bolso. El atractivo de estos bolsos de gama alta firmados por Hermes, Louis Vuitton o Chanel no solo reside en su exclusividad y estatus, sino también sorprenden por su rentabilidad. Mientras las acciones y el oro experimentan altibajos, los bolsos Birkin han demostrado una revalorización constante de su valor en el mercado de segunda mano.
Durante periodos de volatilidad financiera, los bolsos de lujo, y en particular el Birkin de Hermès, se ha posicionado como un activo de inversión a niveles de las obras de arte, los relojes de gama alta o los coches clásicos de lujo. De acuerdo con el informe de Art Market Research, en las últimas dos décadas, los bolsos de lujo han pasado de ser un accesorio a lo que ahora es "la única categoría de coleccionismo centrada en las mujeres".
El marketing de escasez. Este modelo de inversión se sostiene gracias a algo tan básico como es la ley de la oferta y la demanda. Hermès, como la mayoría de las marcas de lujo, aplica una estrategia de escasez deliberada con una producción muy limitada de sus piezas en la que, curiosamente, es la marca quien elige qué productos vende a sus clientes.
La alta demanda de estos artículos hace que se generen listas de espera entre sus clientes que pueden llegar a los seis años. La percepción de exclusividad incrementa el deseo por el producto, lo cual provoca que se revalorice automáticamente en el mercado de segunda mano al salir de la tienda. Este es un fenómeno bastante habitual en los mercados. Por ejemplo, lo vivimos tras el lanzamiento de la Sony PS5, cuando estas consolas llegaban con cuentagotas a las tiendas y duplicaban su precio en el mercado de segunda mano o, a otro nivel, con los Ferrari Purosangue.
Más Birkin, menos oro. El Birkin de Hermès, está considerado como una de las mejores inversiones en el mundo del lujo, superando incluso a activos tradicionales como el arte o el oro en términos de rentabilidad y estabilidad. Un estudio de 2020 elaborado por Credit Suisse y Deloitte, reveló que el valor de los Birkin aumentó un 38% en promedio ese año, superando ampliamente el rendimiento del S&P 500, que creció un 16,3% en el mismo periodo.
Un estudio de 2016 de Baghunter comparó el valor de los bolsos de Hermès con respecto al S&P 500 y al oro desde 1995. Los resultados mostraron que el comportamiento financiero de los Birkin fue mucho más estable y rentable que el índice bursátil y el valor del oro, con un mercado menos volátil y mayores rentabilidades interanuales. Mientras el S&P 500 ofreció un retorno promedio anual del 8,65% y el oro apenas un 1,9%, los Birkin registraron un incremento medio anual del 14,2%.
Un Birkin de segunda mano: de 9.000 a 200.000 dólares. Al igual que sucede con el mercado de los relojes de lujo de colección, la alta demanda de determinadas ediciones de Birkin ha generado revalorizaciones espectaculares. Un Birkin de Hermès cuesta entre 9.000 y 12.000 dólares, pero puede alcanzar precios de hasta 200.000 dólares en subastas o plataformas especializadas, dependiendo de su rareza, estado y materiales.
En 2015, un Birkin de piel de cocodrilo rosa se vendió por un récord de 223.000 dólares, consolidando la reputación de estos bolsos como inversiones de alto rendimiento. El Birkin más caro jamás subastado fue un Birkin 30 Himalaya con diamantes, que alcanzó un precio de 450.000 dólares en 2014.
La ofensiva china: el verdadero valor de los Birkin. En un contexto de guerra comercial como la actual, el auge de los Birkin como inversión no ha estado exento de polémica. Tras la imposición de aranceles por parte de la administración Trump, las redes de influencers chinos han iniciado una campaña para desmitificar el valor de estos bolsos. Durante los últimos días, TikTok y X se han llenado de vídeos de estos influencers chinos dirigiéndose directamente a los clientes de estas marcas analizando los costes de fabricación en China.
En su mensaje se indica el precio de fabricación de un Birkin de Hermès ronda los 1.400 dólares, mientras que las marcas de lujo venden sus bolsos por un precio hasta diez veces superiores a su coste real, alimentando la percepción de que existe una burbuja especulativa en torno a estos artículos de lujo.
Imagen | Hermès
utm_campaign=17_Apr_2025"> Rubén Andrés .