El Gran Fraude de la Canela: Bruselas Alerta sobre Dos Tercios del Producto en Europa

Imagina que abres tu especiero, sacas ese frasco de canela que da un toque cálido y aromático a tus postres, cafés y guisos, y descubres que lo que creías era pura especia de calidad, podría ser, en realidad, un producto adulterado o, en el mejor de los casos, una variante inferior mal etiquetada. Este escenario, que podría sonar a trama de una novela de misterio culinario, es la cruda realidad que ha revelado Bruselas: dos tercios de la canela que se comercializa en el mercado europeo presenta problemas. Es una noticia que no solo sacude la confianza del consumidor, sino que también plantea serias preguntas sobre la integridad de las cadenas de suministro alimentario y la eficacia de los controles. ¿Estamos pagando por oro molido y recibiendo simple arena? La magnitud de este "gran fraude" es alarmante, afectando potencialmente a millones de hogares y a la salud pública.