La alcaldesa de Cúllar denuncia la difusión de imágenes vejatorias suyas creadas con IA

En una era donde la tecnología avanza a pasos agigantados, prometiendo innovaciones que transforman nuestras vidas para bien, surge también una sombra inquietante que amenaza la dignidad y la integridad de las personas. El reciente caso que ha sacudido a la tranquila localidad de Cúllar, en Granada, es un crudo recordatorio de esta dualidad. Su alcaldesa, Carolina Navarro, ha alzado la voz para denunciar públicamente la difusión de imágenes suyas de naturaleza vejatoria, generadas artificialmente mediante inteligencia artificial (IA). Este incidente no es solo un ataque personal a una figura pública; es una agresión directa a los principios democráticos, a la privacidad y a la confianza social, y un toque de alarma sobre los peligros que acechan en el mal uso de herramientas tecnológicas cada vez más sofisticadas. La noticia ha corrido como la pólvora, no solo por la gravedad del acto en sí, sino por la profunda implicación que tiene para el futuro de la esfera pública y la protección de la imagen de cualquier individuo en la era digital.

Diario Tecnología

El futuro del conocimiento según Jensen Huang: Cuando el 90% sea generado por la IA y "esté bien"

La revolución de la inteligencia artificial avanza a un ritmo vertiginoso, redefiniendo no solo cómo interactuamos con la tecnología, sino también la esencia misma de nuestra existencia y, más fundamentalmente, la forma en que generamos y asimilamos el conocimiento. En este contexto de transformación sin precedentes, la figura de Jensen Huang, el visionario CEO de NVIDIA, emerge como un profeta de la nueva era. Sus predicciones no suelen pasar desapercibidas, y su reciente afirmación ha resonado con una fuerza particular: "El 90% del conocimiento será generado por IA en dos o tres años". Y, lo que es quizás aún más provocador, su defensa de que "eso está bien". Esta declaración no es solo una visión futurista; es una invitación a reflexionar profundamente sobre nuestro papel en un mundo donde la creación intelectual podría estar predominantemente delegada a algoritmos avanzados. ¿Estamos preparados para un cambio tan radical? ¿Es realmente un escenario deseable? Acompáñenos en este análisis detallado para desentrañar las implicaciones de estas palabras que, sin duda, marcarán el rumbo de la innovación y la sociedad.

Diario Tecnología